No voy a hablar de la escuela que queremos para el futuro, para nuestros hijos, para la que nos va a dar de comer cuando seamos maestros... voy a hablar de la escuela que quiero yo, personalmente, para el mañana, ya que mis ideas serán compartidas por algunos docentes, y no por otros, por lo que no me puedo permitir el lujo de hablar en plural. Hay que empezar diciendo que la escuela que queremos para el futuro, se parece mas bien poco a la escuela del presente, ya que esta escuela actual, es similar a la de hace siglos, y si hemos avanzado tantísimo en aspectos como la tecnología, los transportes, las comunicaciones, y un sin fin de cosas ¿Por que en educación sigue todo prácticamente igual? Pues porque las personas que tienen que cambiar esto, no quieren, o mejor dicho, no les interesa. La educación, como todo en este mundo, se ha convertido en un negocio: interesa dar asignaturas, aunque no aporten nada a la vida del alumno, porque comprar esos libros y el material que requieren genera un dinero, o que a los maestros le sea mas cómodo llegar al aula, soltar la lección, y olvidarse de lo demás, total, el sueldo a final del mes va a ser el mismo haga lo que haga con esos niños.
En definitiva, a muchos les parece muy laborioso ponerse a estas alturas a intentar que la educación aspire a algo mas que a darle el titulo al niño en junio o septiembre, porque para muchos, pensar para mejorar las cosas no va con ellos. Y lo mismo pasa en la Universidad, ahora la mayoría de alumnos habla mucho de que cuando ellos sean maestros, no darán las clases típicas, que cambiaran la metodología, que serán maestros que formen personas y no maquinas para trabajar, pero habrá que ver cuantos luego de verdad lo hacen, a la hora de la verdad.
Y ya puestos a pedir como debería ser la escuela del mañana, pues debería ser mas flexible, me explico: que no se base todo en los exámenes, que no está mal que los haya, pero no todo se debe centrar en eso ni mucho menos. Es importante analizar el progreso y evolución que hace cada niño, ser conscientes de lo que ofrece respecto a sus posibilidades, pero sobretodo, que cada maestro logre motivar a los alumnos para que tengan ganas de ir a la escuela. Porque el colegio es para niños, los niños están en la infancia ¿Y que debe predominar en la infancia? Seguramente el lector de esto haya pensado lo que va a leer a continuación: la alegría. Exacto, la alegría es de lo mas importante en el niño, por lo que no puede faltar en la escuela, es mas, debe tener un papel protagonista. Hay que cambiar que los niños vayan al colegio por las mañanas sin ganas, temiéndose otras 5 o 6 horas mas metidas en un aula escuchando al profesor y haciendo lo que este les mande. Por eso la educación en el colegio deberá centrarse mas en el niño, en sacarlo del aula de vez en cuando para que aprenda también con lo que hay a su alrededor.
Seria un gran paso dejar de hacer que los niños memoricen tanto. Que memoricen de vez en cuando, bueno, vale, pero que memoricen todo el temario para soltarlo en el examen y olvidar después, eso es perder el tiempo, para eso mejor no hacer nada.
Otro aspecto mejorable es el trato profesores-familia. La educación debe ser un proceso mutuo entre esos dos conceptos, por lo que si uno actúa muy bien, y el otro no, eso está descompensado. Se debe buscar el funcionamiento optimo de los dos agentes, sin que uno reduzca al otro, sino que los dos vayan al mismo camino: el de educar al niño sacando lo mejor de el.
En resumen, podemos estar escribiendo casi un libro como la Biblia hablando de mejoras que necesita la educación, que son tantas que son imposibles de sintetizar, pero mis ideas para cambiar un poco a mejor serian esas, que el maestro se implique mas en su trabajo, despierte interés de los niños, les haga aprender mientras se divierten, que no todo se centre en el aula y los exámenes, etc. Esas cosas que cualquiera diría para mejorar la escuela, pero que sin embargo, luego solo unos pocos se atreven a hacer.
Buen trabajo otra vez, Alejandro. Estoy seguro de que irás puliendo las ideas y matizándolas a medida que vayas leyendo los documentos del campus y otros que iremos encontrando en el camino.
ResponderBorrarCuando dices "las personas que tienen que cambiar esto, no quieren, o mejor dicho, no les interesa", ¿eres consciente de que tú´ya eres una de esas personas?
Pues aplícate el cuento, porque más abajo pones en duda que algunos o muchos de tus compañeros de clase vayan a trabajar de verdad de manera distinta cuando sean maestros o maestras.
De eso se trata, de empezar por uno mismo, ¿no te parece?
Enhorabuena.
Bueno, seré una de esas personas cuando empiece a trabajar. Ahora mismo, mis ideas de escuela no las puedo aplicar porque no soy docente, soy estudiante que está cerca de serlo.
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